PINTA EL RIO CON HISTORIA

En lo que fue el regreso a Neuquén de la regata del Rio Negro, Nestor y Damián Pinta se quedaron con la competencia e hicieron historia.

¿Habrá mayor alegría para un padre que consagrarse en su especialidad junto a su hijo? Vamos a tener que preguntárselo a Nestor Pinta ya que el experimentado palista logró su victoria número 16 en la Regata del Rio Negro pero esta, no fe una más. Fue la primera vez que corrió junto con su hijo Damián quién, evidentemente, aspira a ser grande como su papá ya que era la primera vez que participaba de esta competencia en la categoría seniors y no dejó lugar a duda.

La competencia comenzó el 11 del corriente mes en el Balneario de Senillosa, contó con 7 etapas y un dia de descanso luego del tercer día de competencia. La tradicional prueba volvió a tener en su camino a Neuquén luego de 6 años en los que la regata no paso por territorio neuquino, solo se corría en Rio Negro.

Los Pinta, oriundos de Carmen de Patagones, remaron palo a palo a lo largo de todas las etapas con la pareja de los hermanos entrerrianos Rodrigo y Mauro Caffa, quiénes tuvieron inconvenientes en la última etapa y eso les permitió al binomio de los Pinta ganar por una diferencia de poco menos de 2 minutos. Al tercer escalón del podio se subió la pareja de Pascual Orellana y Fermín Buchara, representantes de Neuquén.

En la categoría K1 masculino, el trofeo se fue para tierras españolas, ya que el ganador fue el asturiano Walter Bouzan. En la misma categoría pero en su rama femenina, la ganadora fue la roquense Cecilia Collueque.

Nestor “el Piri” Pinta ya se convirtió en un icono de La Regata. Se sumó a Juan de la Cruz Labrin en el selecto grupo de los únicos que ganaron la competencia con 3 compañeros distintos. Pinta, lo hizo en una oportunidad con Hugo Ortega, en otras 14 oportunidades con Martín Mozzicafredo y en este 2020 la ganó junto a su Hijo.

La regata fue una fiesta, participaron más de 150 botes, cifra histórica para esta prueba que luego de 6 años, volvió a estar en 2 provincias.

fotos: Andrés Maripe