PIXAR LO HIZO DE NUEVO

No exageramos con el título, no es una alabanza desmedida, desde hace años que en Disney – Pixar saben cómo hacer emocionar hasta a la persona más dura, tocando temas tan sensibles y mundanos como la familia, la muerte, los sueños personales, la niñez, etc. En estos días, producto de la situación pandémica que atraviesa el mundo por el COVID-19, Walt Disney Pictures, tuvo que en contra de su voluntad liberar numerosa cantidad de títulos estrenados hace muy poco en cines, evitando la recaudación que podrían haber logrado, pero que igualmente se vería frustrada por la cuarentena general que atraviesa el planeta.

Así es que decidieron realizar el lanzamiento anticipado de la versión digital en Disney+ y Blu-Ray de “Onward” o “Unidos” por su título al español.

La película de Dan Scalon nos introduce en un moderno mundo medieval, donde criaturas como centauros, duendes, brujos, hadas dejaron su antigua vida celta, llena de magia para pasar a ser una sociedad moderna como en la que vivimos actualmente, todo muy al estilo “Zootopia”.

En un mundo que cambió la magia por la comodidad de la tecnología se encuentra la familia Lightfoot. Allí es donde conocemos a nuestros protagonistas, Barley e Ian, dos elfos adolescentes, hermanos, con cuerpos y personalidades diametralmente opuestas. Uno gigante, bruto, despreocupado. El otro, más flacucho, pensante, preocupado, asustado y hasta triste. En el último punto del personaje es donde la película toma vida. Cuando Ian cumple sus 16 años, producto de esta situación, su madre les revela un regalo polvoriento que su difunto padre (al cual Ian no conoció) les dejó a ambos hermanos para cuando fueran mayores de edad. Se trata de un viejo báculo de mago, parecido al que usa Gandalf El Gris, con un mensaje escrito, nada más ni nada menos que por el mismo padre de ellos, donde se especifica una leyenda que indica como realizar un hechizo para que él pueda volver a verlos desde la muerte durante 24 horas. Obviamente, las cosas no salen del todo bien, y es donde ellos dos emprenden el viaje para poder solucionar las consecuencias de su magia mal realizada.

Vamos a la crítica. Es imposible decir que la película no es buena, jamás en un estudio de estas características. Lo que si es cierto, es que su guion es demasiado simple, cae en la repetición de clichés de la misma compañía, y el tema que toca, aunque de distinto ángulo, ya viene siendo frecuente, más aún cuando sabemos que “Soul”, la próxima promesa de Pixar va a hablarnos sobre la muerte. Cae en lo obvio, y tiene momentos demasiado infantiles, y a diferencia de otras producciones no da esa reflexión constante a las que nos tienen acostumbrados. Y es que la fortaleza de Pixar, en este caso, es su misma debilidad. Son un estudio con la vara demasiado alta, impuesta por ellos mismos claro. Ya les ha ocurrido con películas como “Chicken Little” por ejemplo o “La Familia del futuro”. Sin embargo, y afortunadamente, no llega a aburrir nunca, pero no es como “WALL-E” que es una película ultra recordable y re-mirable muchas veces, considerada por muchos, y nosotros, la mejor película de Pixar junto con Toy Story 2. Mas allá de todo mantiene una cierta calidad, se podría decir que es de la segunda división de el estudio de películas animadas.

Nada malo que decir en el aspecto visual. En este sentido, siempre dan un paso adelante, haciendo que dentro del rango que debe tener una película para considerarse de animación, se vea todo cada vez más real. Las expresiones, las texturas, los pelos, el agua, el humo, la iluminación dinámica, en fin, otra maravilla más.

En cuanto a la música, es quizás otro de los puntos flojos y que contribuye a que no sea un producto de primera calidad. Es bastante genérica, y no logra transmitir las emociones que la imagen quiere. Dentro del apartado sonoro destacan las voces de Tom Holland como Ian, y Chris Pratt como Barley, excelentes los dos, dotando a los personajes al cien por cien de las personalidades de los actores, y hasta de su apariencia.

La película opta mucho por los colores saturados, pero al mismo tiempo oscuros, los violetas, los verdes, azules que otorgan esa sensación de estar en un ambiente mágico.

Si bien recurre al tema de la muerte, una vez más, Pixar sabe exactamente como enfocarlo hacia otro lado y tocarnos las cuerdas sensibles. Esta vez, a pesar de que hace reflexiones sobre la superación a una perdida importante, lo vuelve hacia lo que tenemos entre nosotros y que muchas veces no le damos la importancia que amerita. Van a querer abrazar a sus hermanos, ya se los decimos.

En definitiva, una buena opción que el ratón Mickey tuvo que liberar al mercado anticipadamente para no perder sus amados millones. Así que, entre todas las películas que vas a mirar durante esta ya larga cuarentena, que todo parece indicar va a extenderse, no te olvides de agregar “Onward” al catálogo. Sentate en el sillón y no salgas de tu casa. ¡Abrazo de Oso!